Sin duda vivimos en una etapa de tremenda incertidumbre sobre el sector del Fitness en el mundo. Aunque esta crisis sin precedente no afecta sólo a nuestro sector, vamos a hablar del él puesto que es el que nos acontece.

El sector del Fitness se ha visto gravemente afectado por la Pandemia mundial de la Covid-19. Si bien los datos médicos y estadísiticos nos amparan, la realidad en España es que las medidas adoptadas por el gobierno para frenar esta situación han perjudicado este sector de manera alarmante. Partimos de la base que desde GestionaFitness somos fieles defensores del ejercicio físico como prescriptor de salud, y no entendiendo como aún respetando las medidas de aforos e higiene se ha podido cuestionar el fitness como foco de contagios en lugar de como parte de la solución, vamos a centrarnos en la gestión de la situación que nos ha tocado.

En el mundo entero y sobre todo en España, se vive una situación generalizada de miedo. Entendemos que una gran parte de los clientes que pudiéramos tener, habrán optado por darse de baja de nuestros centros deportivos por miedo al contagio. Otro tanto por ciento, no menos significativo, es posible que se hayan dado de baja por las restricciones impuestas, bien sea de movilidad intermunicipios o por restricciones horarias. De cualquier forma, son gravísimas las pérdidas que esta pandemia ha llevado al sector del Fitness, pérdidas en muchos casos dificilmente recuperables.

Es de extrema importancia, que a la hora de tratar a los usuarios de nuestro centro deportivo, se tenga una empatía absoluta. Debemos transmitirle a nuestros clientes la mayor tranquilidad posible con respecto a las medidas higiénicas (por supuesto efectivas) en nuestras instalaciones sin dejar de tener en cuenta que detrás de cada cliente hay una historia y situación personal diferente. Es por ello que es momento de facilitarle las cosas, si se han dado de baja, facilitar la reincorporación (cuando ellos estén preparados) con medidas adoptadas para tal concepto. Si cualquier cliente está dudando si apuntarse o no y le ponemos trabas para volver a darse de alta (trabas del tipo: cobrar los gastos de gestión por devolución de recibos, reclamar impagos de hace x tiempo, etc.) es muy probable que ese cliente opte por no apuntarse a nuestro gimnasio y se plantee otras opciones, como el deporte outdoor o simplemente no hacer deporte.

Es momento de promocionar y vender lo que en el fitness llevamos mucho tiempo vendiendo, que es salud, y es momento de cuidar y mimar a nuestros clientes para hacerles entender que nuestro gimnasio no es parte del problema sino parte de la solución.